lunes, 23 de septiembre de 2013

No me gusta abordar mi vida “sentimental” como de manera cursi se le conoce a todo aquello que atañe sentimientos y cosas del amar (y el querer como dice José José), no la rehuyó, al contrario la enfrento como creo que debería de hacerse cara a cara, pero al decir que no me gusta abordarla es algo así como no hablo mucho de ella ni la hago pública, pero estoy aquí escribiendo estas líneas y escribiendo un poco del sentimiento contradictorio que me hizo mella esos días.

Hace un par de semanas recibí un correo de una persona que hasta todavía el principio de este año era mi novia, ya saben aquella con quien parecía que iba a hacerme viejito (más), arrugado (sic) e insoportable (supersic).

La relación termino con un dolor (sigue sin existir una escala para medirlo pero cada quien se las ingenia para afrontarlo y no quedarse tirado) si bien nuestra última conversación ya no siendo pareja no fue del todo amigable pero creo que no era necesaria tanta rudeza ni agresividad en su misiva; creo que deberíamos de llevarnos bien con las personas que alguna vez amamos y que alguna vez nos amaron también creo que no solo hay blancos y negros, existen también los grises y las cosas no necesariamente son malas o buenas simplemente son, no siempre tienen que existir culpables para todo hay cosas que simplemente son o ya no son. Guardo los mejores recuerdos de esa etapa con una mujer hermosa y no menos maravillosa y he optado por olvidar los malos momentos, porque como dice Borges el olvido es el único perdón.

Y así las cosas a pesar de todo, sigue siendo una etapa muy buena y prolífica en mi vida, donde el centro de mi mundo soy yo mismo.


domingo, 23 de junio de 2013

Hoy no se ni de que quiero escribir realmente no estoy seguro de querer hacerlo...pero vamos... he tenido una semana muy ajetreada; a lo mejor solo quiero escribir para sublimar el dolor que me causo un encuentro a principios de la semana con la gran mujer que me acompaño de fines de 2010 a principios de este 2013. Una larga caminata donde respondí preguntas un poco extrañas para mí pero creo que a ella le dieron mucha tranquilidad, terminar una relación es de las experiencias más díficiles para mí y creo que para la gran mayoría de las personas también.
También recibí un mensaje que si bien me entristeció comprendí que sí queremos ser mejores para poder dar lo mejor debemos pasar tiempo con nosotros mismos y disfrutar las etapas de nuestra vida, apaciguar nuestros propios demonios -lo digo por mí- también aprendí que todo lo bueno se hace esperar. 
Si ha sido una de las semanas más intensas y desgastantes para mí pero creo que la que más aprendizaje me ha dado en mucho tiempo; lo único que cambiaría es ese animo melancólico y triste que he tenido estos días.


domingo, 16 de junio de 2013


Apenas ayer, en ese día soleado y caluroso donde pendían de nuestros cuerpos las gotas del sudor por la alta temperatura del sol de la primavera; apenas ayer mientras buscaba la inspiración en esos ojos del único café que me quita el sueño.
Fuímos cuatro bellos especímenes compartiendo el desayuno en la terraza por demás llena de familias, los cuatro con lentes solares que disimulaban las bolsas debajo de los ojos y demás restos de la cruda de la noche anterior; el mesero servía amablemente el café...ese líquido negro cayendo de la cafetera en cada taza con un feo logotipo; el mantel lucía arrugado y recién lavado, sin embargo no podía evitar voltear a ver de reojo la negras uñas de tus manos sin sentir esa necesidad de rozar accidentalmente con mi mano derecha el meñique de tu mano izquierda.
El joven enfrente de mí, apenas le conocía pero hablaba con una naturalidad y como si fuésemos amigo de años, compartía una amistad un poco más añeja con las jóvenes -tú entre ellas- que estaban a mi lado derecho e izquierdo. La del lado izquierdo había sido una extraña casualidad que nos conociéramos, más debo de admitir que de no ser en gran medida por ella y una de sus invitaciones dentro del más estricto ámbito profesional no hubiese tenido la oportunidad de reencontrarte.

Y así fue que la mañana discurrió entre la plática que en momentos rayaba en lo banal, discurría de chismes a anécdotas y una tímida organización de una fiesta, pero no podía dejar de encontrar ese extraño y exótico café parduzco de tus ojos algo encantador, algo que por momentos me obsesionaba y no me dejaba dedicar mis pensamientos a prestar más atención a la plática casi interminable de los demás.
Y en esa tarde por un accidente casí intencionado tuve que dejar ver un rastro de mi triste pasado...rastro que a veces lamento porque al parecer me ha alejado de tus labios por un tiempo indefinido.
Así es como ha discurrido mi vida desde aquel suceso de hace cuatro años que no me ha dejado y no me va a dejar y que he de llevar con absoluta sonrisa y orgullo a pesar de lo que ocurra, a pesar de que haya alejado a otras personas de mi vida.
Solo logro recordar y querer congelar el tiempo en aquel instante en esa noche de domingo en que nuestros labíos se acariciarón tímidamente por primera vez.

"Sentir el amor sin volverme a enamorar"....eso reza la más profunda y menos galáctica de las letras de León Larreguí; a veces quisiera que así fuera, más no es así.

"Love comes quickly whatever you do, you can´t stop falling"...eso dice Neil Tennant en su genial canción del mismo nombre y eso es tan cierto como que el sol sale cada mañana.

"Tanto la quería que tardé en aprender a olvidarla, diecinueve días y quinientas noches"...el maestro Sabina usted si esta peor que Tom Hansen de 500 days of summer.

"I hope someday that we will meet again"...del álbum con nombre de un reptil extinto hace mucho tiempo, más espero que ese día haya quedado todo sanado.

Si bien el último catorce de febrero fue el inicio del final, me encanta enamorarme y dejar toda el alma en cada relación y tal parece que así seguirá siendo, aunque cada vez que una relación termina mi <3 queda hecho añicos su capacidad de regeneración me sorprende más cada vez más.



viernes, 26 de abril de 2013


Un poco de felicidad no le hace daño a nadie, es ese tipo de cosas que sabemos pero a veces me da la impresión que seguimos teniendo muy marcado eso de que sufrir nos redime, nos hace mejores personas. Me ocurrió algo muy parecido el día de ayer, me sentía de la chingada en términos de salud, estaba cansado y me había despertado muy temprano; eso aunado a mi reclusión autoimpuesta desde el fin de mi relación con mi novia.
Ayer tuve oportunidad de acudir al dj set de Vince Clark, si bien pude irme a mi casa a dormir preferí salir a distraerme a pesar de no poder poner unas gotas de alcohol a mi organismo por los medicamentos, pero me divertí mucho, hice como que baile -porque nomás no se me da- y aunque llegue a mi cama a las 3 am y mis obligaciones laborales me hicieron estar temprano en un escritorio frente a la computadora donde escribo esto, tengo la satisfacción de que pase un muy buen rato escuchando música –muy a pesar del cansancio físico- pero me quedo con eso, estamos para disfrutar y vivir la vida y eso de que hay que sufrir es una falsedad.

miércoles, 27 de marzo de 2013

Tengo cierta animadversión a la actividad física conocida como "baile" así de sencillo tengo dos pies izquierdos aunado a la incapacidad de agarrar el ritmo como para coordinarlo y hacer que mis piernas y pies se muevan al compás de una canción; durante años he culpado de esto a mi madre, seguramente no me puso a gatear o a hacer actividades de psicomotricidad cuando tenía 2 años -como cuando me puso zapatos ortopédicos pensando que en solo 2 meses se iba a corregir mi problema de pie plano- pero que carajos, prefiero quedarme en mi casa que ir a una boda a enfrentar la pena de invitar a alguien a bailar (así de ese tamaño es mi timidez).
No es que me queje, pero en repetidas ocasiones he tratado de agarrarle la onda y nomás no; lo cual esta mal porque simplemente, ustedes han conocido a alguna mujer que no le guste bailar? hasta a mi abuelita le gustaba...sigo sin encontrar que otra actividad aumenta los valiosos puntos que un hombre pierde al no saber bailar en el ranking del sexo femenino.